Así planea el Gobierno limitar el uso de tierras para extranjeros
El Gobierno busca regular la posesión y uso de tierras de extranjeros en la frontera agrícola. Expertos lo ven viable, pero piden que no se asfixie la inversión del exterior
En zona rural del municipio de Puerto Gaitán, en el Meta, se desató un conflicto cultural y social por la posesión y el uso de más de 30.000 hectáreas de tierra, donde funciona un proyecto agroindustrial. Ese proyecto fue creado por una comunidad de menonitas –grupo religioso originario de Europa– y terminó desatando una confrontación con indígenas de la etnia sikuani, que reclaman que los foráneos se adueñaron de sus territorios ancestrales.
Esta problemática social, que suma más de seis años, llegó hasta el Congreso, donde se hizo un debate de control a la “extranjerización” de la tierra en el país, que impulsó al gobierno de Gustavo Petro a presentar, por medio del Pacto Histórico, un proyecto de ley con el que se busca regular la adquisición y posesión de tierras por parte de personas naturales y jurídicas extranjeras.
Expertos consultados por este diario plantearon que esta propuesta de regular el uso de la tierra por parte de extranjeros es viable, siempre y cuando el Gobierno deje claras las reglas de juego que garanticen que no se terminará ahuyentando la inversión extranjera en el sector agro colombiano.
Las intenciones del Gobierno
El senador Wilson Arias, quien lidera el proyecto de ley, detalló que la iniciativa busca limitar la propiedad, posesión y tenencia de tierras por parte de extranjeros dentro de la frontera agrícola para garantizar la soberanía nacional y alimentaria y, de paso, proteger los derechos de las poblaciones.
“Este mes se cumplirán 13 años del primer debate contra Mónica Semillas, una compañía brasileña que acaparó irregularmente tierras en el país. En esa oportunidad hablábamos de 13.000 hectáreas y a la fecha se reconoce que están en manos de compañías extranjeras 1.047.000 hectáreas”, señaló Arias para justificar el proyecto de ley.
El parlamentario del Pacto Histórico aclaró que no se busca expropiar tierras ni promover la xenofobia, y detalló que junto a los ministerio de Agricultura y Comercio, el Dane y entidades como el Instituto Geográfico Agustín Codazzi se abordó esta problemática en mesas de trabajo conjuntas y se concluyó que era necesario impulsar una regulación.
Al respecto, la ministra de Agricultura, Jhenifer Mojica, expuso en el debate de control político que es urgente definir un marco jurídico sobre el acaparamiento de tierras y destacó que es un problema universal que ya se ha regulado en otros países. “Las normas no han resultado eficaces para desincentivar el acaparamiento, y por ello se debe trabajar en la regulación”, dijo Mojica.
En ese sentido, la ministra destacó que la concentración de la tierra se refleja en que el 5,4 % de los propietarios en Colombia tienen predios de más de 100 hectáreas, mientras que el 56,7 % de los propietarios tienen predios de hasta tres hectáreas. “Unos pocos propietarios tienen predios grandes y muchos tienen predios pequeños”, apuntó.
Para tratar de frenar esa problemática, se precisó que el proyecto propone establecer las reglas para limitar el acceso a tierras dentro de la frontera agrícola a una Unidad Agrícola Familiar (un área mínima vital) por cada persona natural y jurídica extranjera para evitar el acaparamiento.
Juan José Perfetti, economista agrícola de la Universidad Nacional, aseguró que se debe tener cuidado en no ahuyentar la inversión extranjera y señaló que se debe hablar de regulación si se trata de compras de tierra por millones de hectáreas. “La experticia en el mundo es que ahí sí tiene que haber una regulación por parte del Estado”, expuso Perfetti en diálogo con este diario.
En esa línea, el exministro de Agricultura, Juan Camilo Restrepo, defendió que Colombia es un caso distinto al de países africanos donde los extranjeros acaparan hasta el 40 % del total de la tierra. “Entre nosotros ese problema no existe. Siempre y cuando aporten tecnología, no me parece que la presencia de extranjeros sea un problema serio en la tenencia de la tierra en Colombia”, dijo Restrepo.
Ante estas advertencias, los promotores del proyecto defendieron que no se afectará la inversión extranjera en el país ya que la iniciativa la fomenta estableciendo normas claras para que empresas del exterior entren al mercado sin que esto implique poner en riesgo la soberanía, seguridad y autonomía alimentaria.
Mojica apuntó que la regulación permitirá que se “asegure no solamente el derecho de la soberanía nacional y la seguridad alimentaria, sino también afirma el ordenamiento en torno al agua y la garantía del derecho de propiedad de las comunidades”.
Para saber más: tres intentos fallidos de regulación
El senador Wilson Arias destacó que en el Congreso partidos como el Conservador (2012), el Polo Democrático Alternativo (2012) y La U (2013) presentaron individualmente proyectos de ley con los que buscaban regular el acceso a tierras por parte de extranjeros en Colombia, pero las propuestas no despegaron por falta de discusión. Por esa razón, el parlamentario recogió firmas de 30 congresistas del Pacto, liberales, conservadores, Alianza Verde y La U que respaldan esta iniciativa del gobierno de Petro.
